Medio ambiente

Los ecologistas piden una “solución estructural y urgente” para "salvar" las Tablas de Daimiel

- El Consejo de la Red de Parques Naturales analiza mañana la situación del humedal

MADRID
SERVIMEDIA

Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife y WWF España solicitarán formalmente ante el Consejo de la Red de Parques Nacionales, que se reunirá este martes en Madrid, una batería de medidas como “solución estructural y urgente” para “salvar" las Tablas de Daimiel (Ciudad Real) y “garantizar su viabilidad”.

A juicio de las organizaciones ambientales, ese espacio protegido “sigue muy lejos de responder a los valores y funciones que la ley exige a los parques nacionales en España”.

“Aunque las lluvias recientes han generado una imagen aparentemente positiva del humedal, con algo más de la mitad de su superficie inundada, el estado de conservación de sus ecosistemas y biodiversidad es notoriamente desfavorable y en algunos casos extinto. Las acciones coyunturales propuestas no resuelven las causas estructurales del deterioro y se alejan del modelo de conservación que la ley establece para estos espacios naturales protegidos”, añadieron.

Las organizaciones ecologistas consideran que la principal causa del deterioro es la grave sobreexplotación del acuífero de La Mancha Occidental, que debería alimentar el humedal. “Sin medidas estructurales orientadas a recuperar el régimen hídrico natural, el parque está condenado a perder su integridad ecológica y, con ella, su razón de ser como parque nacional”, apuntaron.

Por ello, plantearán tres “medidas urgentes”. Una de ellas es la reducción sustancial del regadío en el entorno del parque nacional, en superficie y volumen de agua consumida, para permitir la recuperación de los caudales ambientales del Alto Guadiana y la recuperación de los niveles freáticos del acuífero. Esta es la iniciativa prioritaria, que debería abordar la Junta de Castilla-La Mancha con un plan de reconversión agrícola.

Otra se refiere a la “clausura sistemática de pozos ilegales y extracciones no autorizadas” con una actuación coordinada de la Confederación Hidrográfica del Guadiana y la Fiscalía General del Estado. “Este paso es imprescindible para terminar con el expolio del acuífero que debería nutrir las Tablas de Daimiel y que está en el epicentro del robo del agua en España”, añadieron.

La tercera alude al “rechazo a las soluciones artificiales y estructuralmente insostenibles, como dragados, trasvases o profundización de la cubeta del humedal, por contravenir la legislación sobre parques nacionales y estar destinados a perpetuar la antropización del sistema, en vez de abordar la raíz del problema ambiental de las Tablas de Daimiel”.

Para las entidades ecologistas, esos “cambios ambiciosos y estructurales” en la política agrícola y del agua en el alto Guadiana son “imprescindibles” antes de plantearse la inversión de más fondos públicos en un posible Marco de Actuaciones Prioritarias para la recuperación del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, que lidera el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

OBJETIVOS LEGALES

Por otro lado, las organizaciones ecologistas apuntan que las Tablas de Daimiel incumple los criterios de la Ley de Parques Nacionales, de 2014, puesto que “las aguas están contaminadas, los aportes naturales son casi inexistentes, se han colapsado las turberas, han desaparecido hábitats acuáticos de alto valor con plantas clave como la masiega y las ovas, y se ha alterado gravemente la comunidad de aves acuáticas”. “Las soluciones que se proponen profundizan en una mayor transformación y mantenimiento artificial del humedal, que son contrarias a la ley”, agregaron.

La superficie inundada del humedal se ha reducido significativamente en la última década y llegó en diciembre de 2024 a tan solo 25 hectáreas encharcadas de las más de 1.700 hectáreas que deberían mantenerse con agua.

“ÚLTIMA OPORTUNIDAD”

Las organizaciones ecologistas recalcan que las Tablas de Daimiel están ante la “última oportunidad” de salvación. “Si no se adoptan decisiones estructurales inmediatas de gran calado, el parque perderá su funcionalidad ecológica y su condición jurídica de parque nacional”, apostillan.

Para las organizaciones ecologistas, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y la Junta de Castilla-La Mancha comparten responsabilidades en la gestión del espacio, aquel como garante de la red de parques nacionales y de la política del agua y esta, por “haber promovido durante décadas una política agraria insostenible basada en la expansión del regadío industrial”.

(SERVIMEDIA)
26 Mayo 2025
MGR/gja