El cohete más potente de la Agencia Espacial Europea ha culminado así su misión, según informa el departamento de Defensa en un comunicado, tras un retraso de una hora en el lanzamiento que "hizo temer lo peor: la repetición del estrepitoso fracaso en diciembre de 2002".

Una vez superado "este contratiempo inicial, Bono, muy satisfecho, celebró el éxito y tuvo palabras de felicitación para los directivos de Hisdesat", empresa de servicios estratégicos responsable de la fabricación del satélite junto a la estadounidense Loral Space & Communications.

"Esta es una demostración contundente de que el sector industrial español está en su mejor momento, a la altura de los más grandes, y constituye un referente para el mundo", resaltó, ya que las empresas implicadas en el proyecto (EADS-Casa, Sener, Rymsa, GMV e Indra) "han tenido que competir con algunas de las mejores empresas norteamericanas".

Concluyó que "la industria española y la estadounidense se han dado la mano para viajar en el espacio, y el buen entendimiento entre ambos países ha dado y dará grandes frutos, como este satélite que supone un importante avance en la comunicación y seguridad de las tropas españolas desplegadas en el exterior".