ETA

ZAPATERO: "HABLAMOS DE POLÍTICA CON ETA PERO NO HICIMOS NINGUNA CONCESIÓN POLÍTICA A ETA"

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirma que "hablamos de política con ETA pero no hicimos ninguna concesión política a ETA" ya que "el Gobierno mantuvo siempre unos principios clarísimos de que las reglas eran la democracia y la Constitución" durante el proceso de paz.

Rodríguez Zapatero señala, en una entrevista que publica hoy el diario "El Mundo" recogida por Servimedia, que tras el atentado de la T-4 en 2006, en el que murieron dos personas, autorizó nuevos contactos con ETA porque su "principio ético era agotar hasta el último resquicio la posibilidad de que no hubiera más víctimas, es difícil de transferir, es la parte más difícil de ser presidente de una democracia con un grupo terrorista enfrente".

Los contactos "continuaron con una situación ya muy deteriorada, muy deteriorada. Y fue debido al deseo de instancias internacionales. Al ver que tenían toda la buena voluntad de que pudiera verse la luz al final del túnel, de que aquello no fuera el fin...Pero la verdad es que había ya muy pocas posibilidades", aclaró.

El jefe del Ejecutivo, quien afirma que se entregó a "una causa noble desde principios nobles pero que pidió ayuda y no la tuvo", dice que "en enero de 2005 había una serie de hechos que nos hacían pensar que existía una posibilidad de emprender un proceso que acabara en el fin de la violencia". "La posibilidad existía igual que en el 86 o igual que en el 97", matizó.

Agregó que "en un proceso de estas características el que exista una alta probabilidad de éxito no quiere decir que no sea extraordinariamente difícil llegar a consumarla". "Yo creí que existía un terreno para poder llegar al final dialogado de la violencia".

Sobre el fracaso del proceso de paz, dijo, "quedó demostrado que no hay nada más nocivo y perverso que el uso de la violencia". "Que como me decía Tony Blair si es difícil hacerse terrorista es mucho más difícil dejar de serlo", añadió.

Pero que "toda la responsabilidad" (del proceso) es suya, ya que, afirmó, "actué con transparencia, pedí autorización al Parlamento, todos los españoles saben que hemos mantenido un diálogo con ETA y que no ha salido. Eso no ha sido extraño dentro de la historia de nuestra democracia. Lo extraño han sido otras cosas".

El presidente del Gobierno intentó aclarar que no llamó nunca "hombres de paz" a Arnaldo Otegi, dirigente de la ilegalizada Batasuna, ni al etarra José Ignacio De Juana Chaos. En su día, mantiene que dijo que Otegi "estaba por la paz" y que De Juana estaba "a favor del proceso" pero hubo una "mala interpretación", matizó.

Sobre De Juana, Rodríguez Zapatero advierte que si se vuelve a poner en huelga de hambre "intentaría las dos cosas a la vez: que cumpla su condena y que no se muera".

Por último, el jefe del Ejecutivo sentencia que fue "totalmente leal" al Pacto por las Libertades y Contra el Terrorismo, lo que "se ha dicho a veces me parece deleznable, vomitivo. Propuse aquel Pacto y apoyé con toda lealtad lo que pedía el Gobierno (de Aznar) dentro de aquel Pacto".

Y, de manera rotunda, dice que absolutamente no autorizó ningún contacto previo a su llegada a La Moncloa de Jesús Eguiguren con ETA y Batasuna. "Además creo que el compañero Eguiguren no tuvo ningún contacto político. Tenía algún contacto por cercanía personal, no de trascendencia política", señaló.

(SERVIMEDIA)
13 Ene 2008
J