ZAPATERO AFIRMA EN UN DISCURSO CONTRA "EL MIEDO" QUE CATALUÑA TIENE "IDENTIDAD NACIONAL"
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El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, pronunció esta tarde un discurso contra "el miedo" y la "intransigencia" que, a su juicio, ha intentado inocular el PP en la sociedad española, durante el pleno de toma en consideración de la reforma del Estatuto de autonomía de Cataluña.
"Pensando en España subo a esta tribuna", inició su intervención Zapatero para apoyar acto seguido que Cataluña tiene "identidad nacional" y dejando claro que "no estamos ante una reforma de la Constitución", como afirma el PP.
A su juicio, la definición de Cataluña en el proyecto de reforma estatutaria es "impecable", aunque eludió pronunciarse sobre el artículo 1.1 del proyecto, que define a Cataluña como nación, y se fue directamente al apartado 2 de ese mismo precepto.
Ese apartado, dijo, "define con precisión la naturaleza del poder político de Cataluña al disponer que Cataluña ejercerá su autogobierno mediante instituciones propias, constituida como comunidad autónoma de acuerdo con la Constitución y el presente estatuto".
A su juicio, "el centralismo político no es solución sino una parte del problema". En 1978, con la aprobación de la Carta Magna, insistió, "sustituimos el silencio por el debate (...) Un giro irreversible hacia el éxito colectivo".
José Luis Rodríguez Zapatero ha dicho que ganó las elecciones del 14-M "partiendo de la convición de que los desafíos exigen reformas decididas". Cuando hay un Estado políticamente descentralizado, recordó, es "lógico" que sean las comunidades autónbomas las que propongan reformas.
"¿Por qué alimentar el temor a esta España plural y autonómica? ¿Quién y por qué está empeñado en sembrar duda de su capacidad y su empuje? ¿Quién y por qué tiene miedo al debate democrático?", se preguntó el jefe del Gobierno de forma retórica mirando a los escaños del PP y en medio de aplausos de los socialistas.
"EVITAR LA DISCORDIA ENTRE LOS ESPAÑOLES"
"El Gobierno confía plenamente en el Estado de las autonomías. El Gobierno no teme ni al debate ni a las reformas (...) Por ello afirmo rotundamente que vamos a apoyar la toma en consideración de la reforma porque conviene al interés de Cataluña y de España entera", recalcó. "Si a lo que propone el Parlamento de Cataluña y sí a su adecuación a la Constitución".
"La regla primera del patriotismo, tal y como yo la entiendo", prosiguió, "es evitar la discordia entre españoles. La España que amamos es la herencia de fundaciones que trabajaron por la dignidad y se batieron por conquistar la libertad".
Ya entrando en materia, el jefe del Ejecutivo fijó una serie de 'líneas rojas'. Reconoció el "carácter expansivo" de "algunas leyes básicas del Estado" con "exceso de centralismo", pero la propuesta que viene del Parlamento de Cataluña "incurre en excesos en la dirección contraria".
Las competencias reservadas al Estado son "indisponibles para las autonomías", contraviniendo así algunas disposiciones del texto. Y, lo mismo de puede decir, dijo, de la pretensión de que las leyes orgánicas tengan que ser consultadas previamente a la Generalitat.
Para hablar del problema que supone incluir un sistema de financiación, Rodríguez Zapatero ha dicho que es "irresponsable y demagógico acusar a Cataluña de insolidaria". Y ha detallado que los datos demuestran que, a mayor descentralización, más solidaridad. En 1980, explicó, Extremadura disponía sólo del 54% de la renta media nacional, y hoy alcanza el 82%
EL ESTADO NO RENUNCIA A RECAUDAR
Dicho esto, el Estatuto, aclaró, no podrá establecer en su articulado "un modelo (de financiación) con un grado de concrección tal que pueda, por si sólo ser aplicable". Las "líneas rojas" son las siguientes:
1. El sistema fiscal deberá mantener "un tronco común" para toda España.
2. Las comunidades autónomas podrán disponer de más capacidad sobre los impuestos pagados por sus ciudadanos
3. Con independencia de que sean compartidos algunos impuestos, "el Estado debe tener impuestos propios con capacidad normativa y un sistema propio de recaudación"
4. Cualquier negociación deberá dar como resultante un sistema de financiación que haga posible que las autonomías presten "servicios iguales".
En el tramo final de su discurso, el jefe del Gobierno saludó la reforma que traían Artur Mas, Manuela de Madre y Josep LLuis Carod-Rovira, sentados frente a él abajo de la tribuna de oradores.
"Señores del Parlamento de Cataluña, sepan que este gobierno les respetea (aplusos) y respeta lo que han traído hasta aquí", comentó. "Tengo mi convicción de que una cataluña fuerte hace más fuerte a España. A partir de hoy empieza el tiempo del acuerdo, del consneso y el fin de la intransigencia".
Por respeto al Congreso, pidió al PP que no se ausente del debate del proyecto en la Comisión Constitucional del Congreso. "En democracia no hay razones para tener miedo al futuro y sí razones para afrontarlo con esperanza. Los españoles de mi generación sólo conocemos un régimen, la democracia y estoy seguro de que el pesimismo que evocó en tiempos oscuros Gil de Viedma, ha quedado atrás".
(SERVIMEDIA)
02 Nov 2005
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