El Consejo de Administración de la operadora aprobó, en su reunión del pasado mes de diciembre, proponer a la Junta General de Accionistas el reparto de un dividendo de 0,25 euros brutos por acción con cargo a reservas de libre disposicón.

Las pérdidas sufridas se producen tras realizar saneamientos por importe bruto de 16.217,9 millones de euros, que incluye los activos de telefonía móvil de tercera generación UMTS en Europa (12.341,3 millones de euros), el saneamiento correspondiente a la inversión de Terra Lycos (1.303,2 millones de euros), la provisión para la recuperación de los fondos de comercio existentes por las inversiones en Telefónica Contenidos (305,5 millones de euros).

Además, saneó el fondo de comercio de Emergi (49,7 millones de euros) y el fondo de comercio de Mediaways, imputable a la revisión del valor de la inversión de Telefónica Data en Alemania (530 millones de euros).

En estos resultados, también influyó la devaluación del peso argentino, cuyo impacto en el resultado neto fue de 354,7 millones de euros.

Asimismo, la exposición del grupo en las distintas sociedades argentinas se redujo hasta 968,1 millones de euros, incluyéndose en este importe los fondos de comercio, la financiación prestada y l valor patrimonial asignable a estas inversiones.

El Ebitda de la operadora (beneficios antes de impuestos, intereses y amortizaciones) alcanzó en el pasado ejercicio un total de 11.724,2 millones de euros, un 8,4% menos que el alcanzado en 2001.

En este capítulo, la contribución de España al Ebitda total fue del 68,7%, mientras que el peso de Latinoamérica disminuyó hasta el 33,6%.