La película, que se preestrenará esta noche en el cine Callao de la Gran Vía madrileña ha sido producida por Iberoamericana Films, Lolafilms y Telecinco.

La película, con un presupuesto de 400 millones, narra la historia de un asesino psicópata infiltrado en la tuna que elige a sus víctimas a través de Internet. Con Salamanca de escenario cinematográfico, el asesino comete sus crímenes con una pauta simple: morirán los peores estudiantes.

En rueda de prensa celebrada hoy, los directores declararon que habían elegido Salamanca porque "es una ciudad que durante el día es preciosa, pro que por la noche llega a dar miedo". Además, confesaron que se sentían muy satisfechos con el resultado final del rodaje, ya que habían logrado su objetivo: "ponerse en el punto de vista del espectador y conseguir que la gente se lo pase bien".

Silke, protagonista del filme, señaló que había sido "una experiencia íncreible rodar esta película, especialmente por el ambiente de Salamanca y su catedral". Jorge Sanz, que en la película interpreta a un universitario vividor miembro de la tuna, señaló qu "el rodaje fue francamente divertido, siempre intentando mantener el misterio y engañar al público".

Ante una pregunta de un periodista que comparaba "Tuno negro" con la película norteamericana "Scream", los directores aseguraron que "en ningún momento recurrimos a iconos americanos, sino españoles. En las películas americanas no hay estas escenas de humor ni de cama".