El auge del "ciberbullying", que ha ido en paralelo con el de las nuevas tecnologías de la comunicación, ha hecho reaccionar a las autoridades educativas británicas mediante una guía con consejos dirigidos a estudiantes, padres y profesores que se vean envueltos o tenga conocimiento de estas situaciones de acoso.

La mayor parte del cyberbullying lo realizan estudiantes de la misma clase o del mismo año que los escolares tomados como víctimas. "Aunque no deja cicatrices visibles, el cyberbullying de toda clase puede ser extremadamente destructivo", señala la guía.

Para prevenir el "ciberbullying", la guía aconseja que los padres digan a sus hijos que nunca faciliten detalles personales online ni coloquen fotografías personales en las websites. Los mensajes amenazantes no es conveniente leerlos, pero tampoco deben borrarse, ya que pueden ser utilizados como pruebas ante la justicia.

También se indica a los afectados que, "si recibes llamadas que asustan o inquietan, toma nota de las ocasiones y las fechas en que ocurre y da cuenta a la policía". Otra recomendación es no responder nunca e-mails cargados de violencia verbal. "El remitente quiere una respuesta, así que no le des esa satisfacción. Guarda los e-mail com pruebas e informa a un adulto sobre ello", explica la guía.