La IFLRY solicita la adoptación de medidas preventivas contra las sectas, como campañas de información que denuncien a los principales "imperios sectarios", entre los que citan a la Iglesia de la Cienciología, la secta Moon, Hare Krisna, Humanistas, Nueva Acrópolis e incluso al Opus Dei.

Según las Juventudes Liberales y Radicales, las sectas son uno de los problemas más graves que afectan a los jóvenes, especialmente en el mundo desarrollado y Aérica Latina, y por ello es necesario encontrar soluciones a escala mundial, "porque de nada sirve luchar contra las grandes psico-sectas en un solo país".

"Las sectas destructivas", dice la resolución, "suponen una amenaza no sólo para sus víctimas individuales, sino también para la sociedad en su conjunto, por sus actividades delictivas y el gran poder fáctico que en algunos casos ejercen".

Juan Pina, vicepresidente de la IFLRY, manifestó que "los gobiernos de los países más afectados, entre elos el español, han mostrado escaso interés por el tema".