La embarcación sancionada fue detectada cuando capturaba merluza negra y el motivo del apresamiento fue, según las autoridades mauritanas, un problema relacionado con las tallas mínimas autorizadas.

El otro pesquero retenido fue liberado al día siguient tras comprobarse que, aunque no llevaba la licencia a bordo, tenía su documentación en regla.

El presidente de la asociación de armadores, Arturo Castaño, no quiso revelar los nombres de los barcos afectados para no preocupar a los familiares de los marineros y ha expresado su tranquilidad porque dichas situaciones se han resuelto favorablemente.

Además de la multa en el caso del sancionado, los barcos han tenido que afrontar las pérdidas económicas derivadas de la paralización de su actividad drante los días que duró la retención.