Richard Layard, que lidera dicho equipo, ha advertido que un 15% de la población británica sufre esta dolencia, y el coste económico, en términos de horas de trabajo perdidas, ronda los 24.400 millones de euros, lo que supone un 1,5% del producto interior bruto del país.

Layard añadió que actualmente el número de perceptores de subsidios por incapacidad laboral como consecuencia de dolencias mentales es de un millón, lo que supera la cifra de beneficiarios del subsidio de desempleo.

Por ello, el experto ha aconsejado la creación de una red de 250 centros especializados que ofrezcan asistencia psicológica a estos enfermos, en lugar de tratarlos solamente con fármacos, como se hace ahora, debido a la falta de psicólogos. Sólo un 4% de los que sufrían esta dolencia recibieron terapia psicológica durante el pasado año.

Según Layard, la terapia psicológica podría beneficiar a unas 800.000 personas y tendría importantes beneficios económicos.

Aunque el coste de este tratamiento por paciente puede ascender a1.076 euros,gracias a él los enfermos se mantienenuna media de doce meses sin síntomas de la enfermedad, en los dos años siguientes a haberlo recibido, y logran una reducción del absentismo laboral o de sus periodos de baja equivalente a un mes, lo que en términos económicos se traduce en unos 2.700 euros.

Una portavoz del ministerio de Sanidad ha anunciado que en breve se pondrán en marcha varios centros piloto asistencia psicológica, cuyo objetivo ese facilitar el acceso a este tipo de terapias.