Cristina Cuesta, portavoz de Covite, dijo a Servimedia que la extorsión de ETA es "uno de los agujeros negros de la criminalidad terrorista", aunque destacó que es "injusto" fijarse sólo en el momento en el que los empresarios ceden a la extorsión de los etarras.

Cuesta destacó de que antes de que se efectúe el pago a los terroristas se dan otros pasos, en los que la sociedad y el Estado podrían hacer actuado "de una manera responsable y consensuada".

Explicó, en este sentido, que "si todos los que han pagado se hubieran visto amparados por sus organizaciones y por el Estado, eso se hubiera neutralizado de alguna manera".

A su juicio, "ha habido una desidia absoluta por parte del Estado, especialmente por parte del Gobierno vasco, que no ha dado cobijo ni protección" a los empresarios extorsionados.

No obstante, Cuesta también opinó que "se paga alegremente (a ETA), como si ya estuviera asumido", algo que dijo ha sido uno de los factores que han llevado a la pervivencia de la banda terrorista.