Hernández agrgó que hoy y mañana continuarán concentrados en las factorías afectadas por la extinción de contrato. Además, el próximo viernes, a las ocho de la mañana, iniciarán una huelga de hambre indefinida en el Ayuntamiento de Cartagena.

Por su parte, el portavoz de la Ejecutiva del PSRM-PSOE, Silvino Jiménez, calificó el asalto a la sede socialista como "un acto brutal y vandálico que atenta contra los principios más elementales de la Constitución" y anunció que la Ejecutiva socialista "va a denunciar a los rganismos oportunos estos hechos".

El secretario general de los socialistas murcianos, Juan Manuel Cañizares, manifestó que este hecho le produce "repulsa y lo ocurrido sólo servirá para ahuyentar cualquier tipo de inversión en la región, ya que la imagen que se ofrece es deplorable".

El secretario general-regional de UGT, Pedro Mompean, indicó que "los trabajadores de fertilizantes están defendiendo sus puestos de trabajo" y que su organización condena este tipo de actos, que calificó de "vandalsmo y terrorismo social".

No obstante, Pedro Mompean relacionó el vandalismo en la sede socialista de Cartagena con "el vandalismo que viene haciendo el grupo KIO en España, con la permisividad del Gobierno central".

Por otra parte, la delegada del Gobierno en Murcia, Concepción Sáez, pidió a los trabajadores que "tengan conciencia de que la violencia no es la vía más adecuada para resolver su situación" y afirmó que en el origen de los incidentes de ayer podrían estar implicados "elementos margiados ajenos a los trabajadores que intentan destrozar el orden democrático".

Ayer tarde, el mobiliario de la agrupación socialista Cartagena-Centro fue destrozado por un numeroso grupo de personas que penetró en el local en el transcurso de una manifestación de trabajadores de fertilizantes, mientras en el interior de la sede se encontraban dos secretarias y dos militantes que no sufrieron daños personales.

Los trabajadores de Fesa-Enfersa, afectados por un expediente de extinción de contratos, s dirigían en manifestación a la Plaza de España, donde iban a celebrar una asamblea.

Tras llegar la cabeza de la manifestación al edificio de la sede socialista, un grupo numeroso de trabajadores entró por la fuerza y destrozó todo lo que encontró a su paso: mesas de juntas, dos ordenadores, una máquina fotocopiadora, archivos de documentos y fax, entre otros elementos del mobiliario, para posteriormente salir a la calle, donde quemaron un sillón y varias carpetas y colocaron una pancarta en el balcónde la sede con el lema "Fertilizantes en lucha".

Por otra parte, la plantilla de Enfersa permitió ayer tarde salir de la factoría a los dos directivos que mantuvo retenidos durante veinticuatro horas, el director, Francisco Javier Sanz Alcolea, y el jefe de personal, Mariano Pérez Olmos, que abandonaron la factoría en taxi, ya que el director encontró su coche con las cuatro ruedas pinchadas.

Con respecto a la huelga de hambre que los comités de empresa de Fesa-Enfersa y Asur iniciarán el próximoviernes, el secretario comarcal de Químicas de CCOO, Francisco Segura, dijo hoy que "ya sólo sirve jugarnos nuestra vida en defensa de los puestos de trabajo".