Así se expresó Calviño al ser preguntada por una posible revisión de las previsiones macroeconómicas como consecuencia del conflicto bélico en Ucrania. Tras admitir que el impacto “será significativo”, indicó que se traducirá tanto en una revisión a la baja del crecimiento como al alza de las previsiones de inflación.

“Se trata de un impacto que puede ralentizar la recuperación económica fuerte que se produce desde mediados del año pasado”, prosiguió Calviño, quien destacó que el mercado de trabajo está atenuando ya la ralentización sufrida a mediados de marzo.

Por todo ello, concluyó que “sigue la recuperación económica en el país pero naturalmente será menos intensa como consecuencia de la guerra”.

En todo caso, se mostró confiada de que si España puede finalmente aplicar el tope al precio del gas y rebajar hasta un 50% el precio de la electricidad, el impacto en la economía se podrá ir normalizando en la segunda mitad del año.

“Es una medida de alto impacto que es nuestra prioridad ya que es importante cerrar esta parte del plan de respuesta para que el conjunto de medidas tenga el máximo impacto y permitan frenar los precios y una evolución más estable de la economía a partir del segundo trimestre del año”, apostilló.