Según informó Bankinter, se trata de un producto de seguro en el que el cliente, a cambio de una prima única, obtiene de forma periódica una "atractiva" rentabilidad para su inversión, con importantes ventajas fiscales, y que, en caso de fallecimiento, permite recuperar el dinero invertido más un importe adicional.

El asegurado tiene, por tanto, la oportunidad de invertir en un seguro que le garantiza el cobro de unas rentas periódicas desde el mismo momento de la contratación y mientras viva el asegurado.

Al contratar el producto se establece un tipo de interés que estará vigente durante el plazo convenido (a elegir por el cliente: 3, 5 ó 10 años), y que dará lugar a un determinado importe de renta garantizado.

Una vez finalizado el plazo, este tipo se revisará, fijándose el que resulte aplicable en ese momento para el plazo seleccionado, el cual traerá consigo un nuevo importe de renta. Este mecanismo se repetirá hasta el fallecimiento del asegurado o finalización de la póliza por rescate.