Esta campaña, que se inició el pasado mes de mayo, se desarrolla todos los años durante los meses de junio, julio y agosto, y tiene como objetivo evitar el riesgo de incendios, sobre todo en la periferia de la ciudad, donde hay numerosas zonas terrizas, solares y taludes con abundante vegetación que ya está muy seca en estas fechas y que supone un grave riesgo, sobre todo cuando está cerca de viviendas.

Las tareas de desbroce están incluidas en los contratos generales de limpieza y las realizan los Servicios de Limpieza Viaria. En casos de alto riesgo, es decir, cuando se trata de zonas próximas a edificios habitados en las que la vegetación supone un peligro para la circulación rodada por falta de visibilidad, las labores las acomete el Servicio de Limpieza Urgente (Selur).

El equipo de este año está formado por 101 operarios, que cuentan con 59 desbrozadores manuales y tres sopladores para las parcelas más pequeñas y de difícil acceso, mientras que para los solares de mayor extensión y mejor acceso se usan 15 palas mecánicas y una moto-niveladora en los taludes. Además, cuentan con 11 camiones de peinado para retirar lo desbrozado, 16 vehículos auxiliares y tres camiones brigada para los desplazamientos.

Según el Ayuntamiento, la participación y colaboración ciudadana para evitar incendios en estos solares es fundamental, por lo que destaca la importancia de que no se dejen escombros ni basuras, ni se arrojen colillas. Además, pide que ante cualquier incidencia se avise a los servicios de emergencia a través del 112.