Según informó el Instituto Armado, en la llamada ‘operación Travel’ se ha detenido a ocho personas y se ha declarado a otras dos como investigadas. Todas ellas son de nacionalidad rumana, de entre 25 y 32 años, y se les acusa de los delitos de pertenencia a organización criminal, robo con fuerza, robo con violencia, hurto y falsedad documental.

En el marco de la operación se han realizado tres registros domiciliarios en Castellón, donde se ha intervenido 6.635 euros, 2.550 libras y 1.140 dirhams (moneda oficial marroquí). También se han intervenido 11 vehículos de alta gama con los que los arrestados cometían los robos, 25 relojes de pulsera y 20 teléfonos móviles, entre otros efectos.

La banda desarticulada se dividía en células itinerantes para cometer robos, por lo que utilizaban pisos en poblaciones limítrofes a la autopista A-7 para pernoctar y esconderse hasta cometer nuevos asaltos.

APARCAMIENTOS DE FÁCIL ACCESO

Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de noviembre a raíz de varios robos cometidos en áreas de servicio de la A-7. Las pesquisas permitieron determinar la existencia de un grupo de personas que estaba cometiendo robos por distintos puntos de la geografía española, principalmente en Valencia, Alicante y Castellón, aunque llegaron a actuar en Tarragona y Murcia.

La banda estaba especializada en la sustracción de efectos del interior de vehículos que se encontraban en áreas de servicio. Normalmente elegían aparcamientos abiertos de fácil acceso, donde elegían a personas de avanzada edad y con vehículos con matrícula extranjera que estuvieran de paso o de vacaciones por el territorio nacional. Asimismo, utilizaban vehículos de alta gama para huir tras los robos.

Uno de los integrantes distraía a las víctimas preguntándoles por un lugar o una dirección mientras otro integrante aprovechaba para abrir la puerta del vehículo y sustraer los efectos que tuvieran en el interior. En ocasiones, la víctima se aferraba al bolso, por lo que llegaba a ser arrastrada varios metros con el vehículo que utilizaba la organización para huir.

ROBOS A LA MISMA PERSONA

En otras ocasiones aprovechaban que el perjudicado se encontrara durmiendo en el interior del vehículo para fracturar la ventanilla, saltando los fragmentos del cristal sobre la víctima, momento en que robaban los efectos.

El grupo delictivo llegó a cometer dos robos a la misma persona en un espacio de tiempo de 20 minutos. Esto ocurrió en el área de Servicio de Sagunto (Valencia), cuando una mujer de origen extranjero junto con su hija menor de edad pararon con su vehículo con el fin de descansar del viaje, momento que aprovechó la organización para robar las maletas del interior.

Posteriormente, cuando la perjudicada contactaba con la Guardia Civil para que la socorriesen, otros integrantes de la red fracturaron la ventanilla para sustraer el bolso.