Sami Kharat, médico de la Asociación de Apoyo al Pueblo Sirio aseguró este martes a Servimedia que “no hace falta una intervención militar en la zona”, sino que la comunidad internacional “debe escuchar al pueblo sirio que desde hace dos años lleva pidiendo una zona de exclusión aérea, que se creen corredores humanitarios para que llegue la ayuda y que se facilite el acceso a armamento”.

Kharat declaró que si la comunidad internacional concediese a los rebledes armas, se equilibraría el acceso de armamento de las dos facciones enfrentadas desde hace dos años en Siria y, por lo tanto, "lo más seguro es que el régimen caería".

Asimismo, Kharat explicó que el pueblo sirio “ve con buenos ojos que sean atacados las posiciones” de Al- Assad, pero la sociedad “recela de una intervención extranjera porque sospecha” que ésta sólo se emprenda para “defender los intereses de las grandes potencias”.

En este apartado, Kharat afirmó que la población siria no está a favor de una intervención internacional “porque no tiene muy claro cuáles son las intenciones” de los países extranjeros con esta medida.

Preguntado por el acceso de la población a la ayuda humanitaria internacional en el ámbito sanitario y alimenticio, Kharat esgrimió que en muchas ocasiones esta ayuda no llega al pueblo sirio por “falta de organización” de la comunidad internacional ante la falta de "corredores humanitarios" y porque el régimen de Al-Assad impide que ésta llegue a su destino.

Con respecto a la denuncia de los rebeldes por el empleo de armas químicas por parte del régimen sirio, Kharat dijo que el régimen de Al-Assad es “el único que tiene la infraestructura para bombardear con armas químicas” y, afirmó, que “los revolucionarios serían incapaces de hacerlo porque su objetivo es conseguir un Estado de derecho” y porque no dispone de" medios" para el empleo de arsenales químicos.