En una entrevista en Esradio, recogida por Servimedia, la número uno del PP por Barcelona al Congreso llamó a los españoles a votar el 10-N para que “quiten a Sánchez” y así poder “quitar a Quim Torra”, el presidente de la Generalitat de Cataluña.

“Tenemos un grave problema y es que el presidente del Gobierno en funciones tiene una relación de intimidad estructural con los incendiarios”, denunció Álvarez de Toledo, y por ello explicó que ya no va a pedir que “firmeza democrática al político que mantiene acuerdos con los incendiarios”.

Para “devolver el orden, la paz civil y la libertad a Cataluña”, recordó que están las urnas. “Lo más útil que podemos hacer en estos momentos es decir españoles, a votar”, opinó la portavoz parlamentaria de los populares, desde la creencia de que Sánchez “no va a actuar”.

Por ello, consideró que los españoles “tenemos una oportunidad” que paradójicamente Sánchez ha dado para “restaurar el orden de libertad y paz civil en Cataluña”. “Aprovechémoslo”, reclamó Álvarez de Toledo.

Valoró que el PSC “hace mucho tiempo” que “no tiene remedio” porque “se empeña en salirse del bloque constitucionalista de manera obstinada” y ha sido “el gran blanqueador y legitimador del nacionalismo”. Por ello consideró pertinente dirigirse directamente a los españoles para que con su voto puedan “plantar cara” y mostrar una “alternativa constitucionalista”.

Defendió que hace falta poner en marcha “un plan” en Cataluña, ”cosa que no ha habido en 40 años” con “cesiones y mimos al nacionalismo” pero sin “fortalecimiento del constitucionalismo”. “Me preocupan, inquietan y desasosiegan las manifestaciones de desunión del constitucionalismo”, añadió.

En este sentido, dijo que la manifestación del día 27 de octubre en Barcelona que ha convocado Sociedad Civil Catalana ha de ser “masiva” y opinó que cada partido convoque su manifestación cuando se requiere “unidad y altura” ante la situación que vive Cataluña. “Necesitamos coordinación constitucionalista”, incidió.

Por último, reclamó al ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, que prohíba la huelga que está prevista mañana en Barcelona, porque no es tal, sino “un sabotaje, un ‘kale borroka’ masivo encabezado por el terrorista Carlos Sastre”.